martes, 16 de octubre de 2012

Jesús Quevedo Terán


Transcripición de  Jesús Quevedo Terán



En mi condición de Cronista de Carache, no puedo dejar esta primera oportunidad, para venerar la memoria de dos ilustres coterráneos que me han precedido en esta honorífica actividad que me confiere el ayuntamiento del Municipio autónomo Carache: Don José Juan Rodríguez Quevedo y Don José Román Saavedra, coterráneo de estos que supieron dar todo lo mejor de sus capacidades el progreso de su pueblo; el primero desde su cátedra de artista y ciudadano ejemplar y el segundo por sus dotes de carachero integral, amante de la más bellas tradiciones y genuino representante de la cabalidad del ciudadano de esta tierra. De ambos solícito en mis oraciones y estoy convencido que desde el lugar que les ha destinado el todopoderoso, alumbraran el camino que debo transitar para el cumplimiento  de la honrosa misión que me ha sido encomendada.
 
En el año de 1834, la población de Carache asume su condición de Villa, Con el nombre de San Juan Bautista de Carache, allí vive desde hace algún tiempo el Coronel Miguel Vicente Cegarra.
La tradición asegura que durante esta época el coronel Cegarra el concejal y se propone y logra alinear las calles de la población a tiro de fusil, para lo cual se vale de un original sistema: coloca un chopo y apuntando a la dirección previamente señalada, dispara, la trayectoria de la bala será la línea de la fila de las casas de uno  y otro lado  de la calle, repitiendo el procedimiento en cada una de ellas por cuadras y manzanas.  Es difícil conseguir  una población en cualquier lugar de Venezuela  capaz de igualar a las calles de Carache en simetría y rectitud.
1835, se registra la fundación para el Cantón de Carache, de una importante comunidad que vino a vitalizar al Cantón por el don de su gentes  de gran laboriosidad, su agricultura  y la cría existente en esa comarca, se trata de Candelaria, mejor conocida como Chejendé; los hacendados Juan de la Trinidad Cañizalez y Carmen Peña, donan terrenos para levantar la población.
Chejendé quedó formando parte del Distrito Carache hasta el año 1988, cuando el Distrito Carache dividido en dos municipios autónomos municipio Carache (Carache, La Concepción Cuicas )  y municipio Candelaria(Chejendé, Bolivia, Mitón, Torococo y José Felipe Márquez Cañizalez)
1836, Debido a la fracasada insurrección “reformista” encabezada por el sempiterno faccioso Pedro Carujo contra el Presidente José maría Vargas, (el mismo de la conjura de 1822 para asesinar al Libertador de Bogotá) el coronel Cegarra tuvo que marchar al exilio y abandono de Carache.
Mitón, cabecera del Municipio Cegarra, honra al prócer Miguel Vicente cegarra, su origen se remonta a la época del encomendero Juan Pacheco  Maldonado en el siglo XVIII, su nombre vine de Cuicas Mitombis, tiene una temperatura de 22o. C y altura de 1150 mts. Sobre el nivel del mar.
De todos estos pueblos el más antiguo es Carache, como pueblo se remonta a 1621 cuando el capitán general de la Provincia  de Venezuela, se visita en Trujillo reparte la tierra entre naturales, su importancia radica en que Carache en la colonia tenía Cabildo, teniente Justicia y Gobernador de indios.
1781 Sucedió en el pueblo el movimiento de apoyo a los comuneros de Mérida denunciada por Don Carlos del pozo ante la autoridad Real.

 
Suplemento El Gañan

El sistema de Colonización empleado por los españoles, fue el de las Encomiendas. La Corona real directamente o mediante sus representantes, concedía grandes extensiones de tierras a los Beneméritos de las Indias, es decir, a los conquistadores, a los pacificadores y a los descendientes de unos y otros, estas concesiones se hacían de por “dos vidas” (dos generaciones) al final de las cuales debían retornar al dominio Real, en este último caso podrían ser arrendadas a terceras personas.

Misión de los Encomenderos era civilizar a los indios enseñándoles la religión Cristiana y el idioma además de los trabajos útiles, cobrarles el tributo real y fundar la agricultura y la Cría. Este sistema se mantiene en Trujillo hasta el año de 1687, fecha en que una Cédula Real concede la libertad a todos los indígenas de la Jurisdicción y prohíbe que los naturales sirvan como esclavo.

La antigua Comarca de los Cuicas constituye algo así como un Distrito o Municipio cuyo centro es la Ciudad de Nuestra Señora de la Paz de Trujillo. La misma forma parte de la Gobernación de Venezuela hasta el 15 de febrero de 1786, cuando una Real Cédula resuelve convertirla en dependencia de la Gobernación de Maracaibo.

En la ciudad de Trujillo funciona en cabildo con sus Alcaldes Mayor y Ordinarios: Con sus regidores y demás funcionarios de rigor. El territorio ha sido dividido en Doctrinas, la número 11 corresponde a la DOCTRINA DE SAN JUAN BAUTISTA DE CARACHE, con las siguientes encomiendas: La del Capitán Lorenzo Fernández Graterol; la de José Fernández Graterol, la de Mateo Pàrraga, la de Bartolomé Castellanos y la de Jacinto Montero atendida por los Indios Militares Juan Baquero y su hermano Juan.

Como se ha visto el año de esta división de Territorio de Trujillo fue el de 1687, no obstante esta encomienda existía desde más de un siglo atrás, Cuando Alonso Bernàldez, gobernador de Venezuela por segunda vez, nombró a Francisco de Labastidas Teniente de Gobernador en Trujillo, este hizo algunos repartos y encomiendas y le asignó una de las principales en el Valle de Carache a Francisco Infante, “por ser uno de los primeros pobladores de esta Ciudad Trujillo de Medellín y no tener indios para poderse sustentar conforme a la calidad de su persona”.

A infante le debió de ir muy bien en esta Encomienda ya que cooperó con la expedición de Diego de Lozada “con sus armas y cabellos, con soldados, Pertrechos y municiones a su propia costa mención en que gastó mucha hacienda”. Había casado con francisca de Rojas hija de Capitán diego Gómez, Alcalde de Margarita, vilmente asesinado junto con su mujer Ana de Rojas, por el tirano Lope de Aguirre.

Luís de Villegas y Francisco Terán fueron otros que recibieron las primeras encomiendas en el Vallen de Carache, estas Encomiendas fueron muy perseguidas por lo productivas, como se verá más adelante.

El hermano Nectario María, en “ORÍGENES DE CARACHE”, dice: “Como queda dicho, Luís de Villegas, de los primeros pobladores de Trujillo y cuya brillante actuación más de una vez hemos podido apreciar y aún destacar en nuestras obra “El maestro de Campo Diego García de Paredes y la función de Trujillo de Venezuela”, aparece como el primer encomendero de Carache”. Y agrega: “No sabemos la fecha exacta en que recibiría el repartimiento y encomienda de San Juan de Carache, pero más tarde hubo de ser por los años de 1560 ò 1561”.

En “Noticias documentales del Estado Trujillo. Caracas, Manuel Pinto C., dice en la pagina doce (12) de dicho libro, textualmente: “En los texto marcados “C” y “D” se nos hace saber que el gobernador Berrìo fue el fundador de Carache y San Antonio de Bomboy, durante su recorrido por la región trujillana en 1621”. En la página 63 se lee: “Noticia de la Función de Carache por el gobernador Don Francisco de la Hoz Berrìo el año de 1621”… “En mi audiencia y Juzgado y ante mí apareció Luís Viegas, (sic) vecino de esta ciudad, y me hizo relación diciendo que en la nueva población que hice en el Valle de CARACHE de los indios o7 3 naturales de él, se les dieran y repartieron tierra necesarias para sus labores y crianzas…”

De una a otras de estas aceleraciones hay una distancia de 60 años según el Hermano Nectario María, las primeras encomiendas fueron dadas en Carache a Francisco Terán, Luís de Villegas y Francisco Infante entre 1560 y 1561 como se ha visto.

Nuevos Encomenderos. Los Tributos a la Corona.

La encomienda de San Juan de Carache, dejada vacante por Sánchez de Oviedo fue objeto de numerosas solicitudes y arduamente disputada por Tomás Castellanos y el Cap. Lorenzo Fernández Graterol, ambos gozaban de gran ascendencia y de rasgos personales sobresalientes. Castellanos llegó al extremo de ofrecer suma de dinero consistente en 10.000 reales de plata para influir en la obtención de la Encomienda, lo que demuestra la extraordinaria fuente de riqueza que representaba la misma, por la fertilidad de sus tierras, el rendidor aporte de los indios, el clima agradable, la ausencia de plagas, la abundancia de aguas y sobre todo la calidad y trato se sus pobladores y su dedicación al trabajo.

La encomienda le entregada al Cap. Lorenzo Fernández Graterol en el año 1687, para entonces tenía 473 indios, repartidos en 4 encomiendas, el trabajo de tres días de los indios para el encomendero fue cambiado por un tributo en dinero o en especies. Las encomiendas que fueron quedando vacantes para el año 1724 las abolió Felipe V, no obstante los indios pagarían tributos a la Real Corona, esta imposición duro hasta la independencia.

En el año de 1777, llega a Carache el Obispo Don Mariano Martí, procedente de Humucaro Bajo permaneciendo aquí durante vente (20) días, saliendo luego para Santa Ana. El Cura Doctrinero residente en Carache era Don Joseph Nicolás Pérez, el templo era de tres naves y los indios conocían la Doctrina Cristiana y según otras informaciones que le dio al Obispo Martí, agregaba que “eran de buenas condición, no idolatraban y solo tenían por vicio beber aguardiente en las fiestas del patrono San Juan Bautista, sobre todo un licor que fabricaban en alambiques”.

Los indios pagaban tributos al corregidor, el cual era entregado al Cura para su estipendio hasta los 50.000 maravedíes y lo sobrante se enviaba al Rey, había para la fecha 2.538 almas, el valle era cultivado en su parte de Caña de Azúcar y además legumbres, verduras y frutos. Según apunta el Historiador Briceño Perozo, la importancia de Carache durante la colonia radica en las circunstancia de haber tenido Cabildo, Teniente justicia y Gobernador de Indios.

En 1781 se suceden en Carache los acontecimientos relacionados con la petición por parte los indios de una amable Libertad y la suspensión total de cobro de impuestos, estas protesta fue hecha directamente por el Gobernador indio y otros pobladores al Visitador de la Renta del Tabaco Don Carlos del Pozo fueron asesores por el cura, que consideramos sea el mismo Joseph Nicolás Pérez, quien recibiera al Obispo Martí, cuatro años antes.
Fuente Bibliográfica:
Quevedo Terán, Jesús
Crónicas de Carache 1991

Anexos Libro Cronicas de Carache


No hay comentarios:

Publicar un comentario